Sí. Debe seguir utilizando gasolina, aunque en una cantidad mucho
menor que la que utilizaba normalmente.
La razón es que la gasolina es una mezcla de hidrocarburos que se
degrada con el tiempo. Por una parte, sufre procesos de polimerización
que forman gomas que pueden obstruir los conductos de alimentación,
filtros y carburador. Por otra parte, como los componentes de la gasolina
tienen distintos puntos de ebullición, aquellos que se volatilizan más
fácilmente (que son los responsables principales del alto octanaje de las
gasolinas especiales) se pierden por evaporación, dejando en el tanque
de combustible un carburante que no reúne las características
necesarias para operar un motor.
Por ello es necesario cargar periódicamente una cantidad de gasolina y
utilizarla, para de esta manera mantener un combustible de calidad en el
tanque.
Recomendamos cargar mensualmente una cantidad equivalente al 10%
de la gasolina que normalmente utilizaba en el mismo período, y hacer
funcionar periódicamente el motor con gasolina.